Tras la muerte de la secretaria, Doris Dana, las cartas se publicaron en un libro. Fueron mantenidas en secreto durante 50 años.
Hace rato que la sexualidad de la Premio Nobel de Literatura chilena Gabriela Mistral es tema de debate. Particularmente, su vínculo con la estadounidense Doris Dana, quien fue su secretaria y luego su heredera. Según adelantó ayer Clarín, en estos días se conoció en Chile una apasionada correspondencia entre las dos, que había sido mantenida en secreto por más de 50 años.
"Tú no me conoces todavía bien, mi amor. Tú ignoras la profundidad de mi vínculo contigo. Dame tiempo, dámelo, para hacerte un poco feliz. Tenme paciencia, espera a ver y a oír lo que tú eres para mí", le escribió en abril de 1949 la Premio Nobel a Dana, que era 30 años más joven.
"Yo me pongo en el viento y en la lluvia tierna, para que estos, viento y lluvia, puedan abrazarte y besarte para mí", le escribe Dana por esa misma fecha.
Las cartas estaban guardadas en las 168 cajas con poemas inéditos, manuscritos, fotos y otros documentos que fueron donados al Estado chileno por Doris Atkinson, sobrina de Dana, cuando ésta murió en 2006. Tras un intenso trabajo a cargo de Pedro Pablo Zegers, conservador de la Dirección Nacional de Bibliotecas, 250 cartas entre Gabriela y Doris, escritas entre 1948 y 1956, fueron publicadas en el epistolario Niña Errante, editado por Random House-Mondadori y la Biblioteca Nacional de Chile.
"Tú nunca habrías hecho lo que yo hice por tenerte. Pero eso no fue hecho por otra cosa, fue un amor violento de alma y cuerpo", escribe Mistral, quien durante muchos años fue conocida por sus poemas a la maternidad y la infancia.
En las cajas donadas por Atkinson había, en total, unas 10.000 cartas intercambiadas con diversas personalidades ligadas al arte, la cultura y la política.
Zegers, el editor afirma que "ex profeso" evitó clasificar de homosexual la relación de ambas mujeres "para respetar la intimidad", aunque reconoció que los lectores harán su propia interpretación. "El lector me va a decir 'no me vengan con cuentos, si eso está claro', pero yo dejo abierta la posibilidad a cualquier especulación".
Gabriela y Doris se conocieron en 1946 y dos años más tarde iniciaron su relación epistolar gracias a la colaboración de Mistral en un libro sobre Thomas Mann que Dana ayudó a editar.
"Tal vez fue una locura muy grande entrar en esta pasión. Cuando examino los primeros hechos, yo sé que la culpa fue enteramente mía", se lee en una misiva para Dana fechada el 20 de abril de 1949 en Veracruz (México), donde Mistral también vivió.
"Tengo para ti en mí muchas cosas subterráneas que tú no ves aún", escribió Mistral en una libreta, en la que Dana añadió: "Quiero conocer estas cosas subterráneas y tú sabes bien que tengo confianza, muchísima confianza. He dado a ti (sic) la prueba de mi confianza".
"Lo subterráneo es lo que no digo. Pero te lo doy cuando te miro y te toco sin mirarte", dice Mistral. "¿Y piensas tú que en mi mirada a ti y mi manera de tocar a ti no hay cosas que yo pueda decir o mostrar? He vivido siglos buscando a ti (sic)", responde Dana.
Respecto del uso frecuente que hace Mistral del género gramatical masculino, Zegers dijo: "al principio pensé que era un error de transcripción, pero lo releí con más calma y lo revisé, literalmente, con lupa. Incluso les consulté a los chiquillos del proyecto: 'ayúdenme a ver si es una o o una a'. Yo lo endoso a una visión más que sexual, paternal". Para él, se ve "un sentido protector" cuando, la poeta firma: "Tuyo Mistral".
Mistral murió en Nueva York, junto a Dana. Dice Zegers: "Hasta eso acomodó en su vida: escoger esa plaza diplomática, el consulado. En una carta, Gabriela le dice: Doris, yo estoy en Estados Unidos por ti".
Escritora.
Su verdadero nombre era Lucila Godoy Alcayaga. Fue diplomática, pensadora sobre los derechos de los indígenas y promotora de reformas educacionales. En 1914, su poema Los Sonetos de la Muerte, le dio reconocimiento y adoptó el seudónimo que la haría mundialmente conocida. Trabajó como cónsul de su país en Madrid, Lisboa y Los Ángeles, entre otras ciudades. Su obra fue traducida al inglés, francés, italiano, alemán y sueco. En 1945 ganó el Premio Nobel de Literatura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario